1 . Roberto Benigni, La vida es bella, Mejor Actor 1998. Para muchos una de las peores decisiones de los últimos años. Se explica incluso el Oscar a Mejor Película Extranjera a La vida es bella por las fibras que llega a tocar el film dirigido por el propio Benigni (y diciendo esto sin haber visto a sus competidoras extranjeras), pero en la categoría de actuación es claro que todos los nominados estaban muy por encima del sobreactuado papel del italiano: sobre todo Edward Norton en American History X y sir Ian McKellen en Dioses y Monstruos, a mi modesto entender quien debió llevarse la estatuilla (por ese papel se llevó la Concha de Plata en San Sebastián).
2 . Crash, Mejor Película 2005. Casi nadie se acuerda de esta película ganadora de tan solo 3 Oscar, insólitamente incluido el de Mejor Película (no confundir con la magnífica Crash de David Cronenberg). Dirigida por Paul Haagis, es una buena película que intenta profundizar acerca de la problemática social –sobre todo racial- de EE.UU. Más allá de algunas destacadas competidoras, como Capote o Munich, la poderosa y artística presencia de Brokeback Mountain, de Ang Lee, ganadora del Golden Globe y los BAFTA de aquella temporada, convierte en casi una afrenta el triunfo de Crash.
3 . Rocky, Mejor Película 1976. Este caso se ha convertido en un clásico de conversación: “Los Oscar no son referente de nada, mira nomás, Rocky le ganó a Taxi Driver”. Rocky es una película con todos los ingredientes necesarios, pero que le ganara a un icono del cine como Taxi Driver fue demasiado (además estaba nominada All the president’s men, otro peliculón). También puede entrar en el debate el triunfo de John G. Avildsen como Mejor Director por el film protagonizado por Stallone, contra Martin Scorsese, a quien durante décadas y con una larga lista de películas notables se le negó el reconocimiento, para recibir el Oscar solo en 2006, por The Departed.
4 . Forrest Gump, Mejor Película 1994.
Forrest Gump es una buena película, sentimental, querida por el público, simpática, pero evidentemente empequeñecida frente a sus competidoras de aquella edición: Pulp Fiction, ganadora de la Palma de Oro de Cannes, y la más que notable The Shawshank Redemption (conocida en español como Sueños de Fuga), film que, además, no ganó ninguna de las otra seis categorías en las que fue nominada. Aquí se puede mencionar para el debate también el rubro de Mejor Director, que fue para Robert Zemeckis, por Forrest Gump, y no para Quentin Tarantino.
5 . Art Carney, Harry and Tonto, Mejor Actor 1974. Que me disculpen los entendidos y el atrevimiento, pero dudo mucho que haya demasiada gente que recuerde al señor Carney y a la película por la que le ganó el Oscar a Al Pacino en la mítica El Padrino II. Este ha sido uno de los muchos errores cometidos con Pacino, resarcidos después, a manera de compensación, con Perfume de Mujer, su único Oscar, en 1992. Recuérdese que el año anterior, 1973, Pacino, por Serpico, perdió con Jack Lemmon, y un año después, en 1975, en una lucha de titanes, se le volvió a escapar la estatuilla con uno de sus mejores papeles (Sonny, de Tarde de Perros), contra el gran Jack Nicholson de One Flew over the Cuckoo’s Nest (Atrapado sin Salida).
BONUS TRACK
Marisa Tomei, My Cousin Vinnie, Mejor Actriz de Reparto 1992.
Confieso ser admirador de Tomei, pero es imposible no mencionar este caso, ampliamente debatido como uno de los errores más saltantes de la Academia, mitos de por medio incluso (se decía que Jack Palance se había equivocado al anunciar el premio, algo bastante improbable). La verdad es que no he podido ver las actuaciones de sus competidoras (me gustó mucho el trabajo de Vanessa Redgrave en Howard’s End), por lo que no puedo opinar al respecto, salvo decir que la actuación en Mi primo Vinnie no es del otro mundo. Marisa se encargaría de reinvindicar esta duda con buenos papeles y nominaciones, como la última por la genial The Wrestler, con la presencia del también genial Mickey Rourke.
EMPATE TÉCNICO - 2007.
No country for old men vs. There will be blood
Dos obras maestras que merecen ganar el premio a mejor película en cualquier competencia. Mucha gente apoya a la primera, de los hermanos Coen y basada en la novela de Cormac McCarthy, que fue la ganadora de la estatuilla, mientras que otros lo hacen por Petróleo Sangriento (su título en español), de Paul T. Anderson e inspirada en el clásico ¡Petróleo! de Upton Sinclair. Yo aquí voy por el empate técnico, aunque ligeramente inclinado hacia Petróleo… por el plus de la arrolladora actuación de Daniel Day Lewis (sin desmerecer las actuaciones de Javier Bardem, Tommy Lee Jones y Josh Brolin en No country…).
Se han quedado muchos otros casos en el tintero, por falta de espacio, olvido o ignorancia supina, pero sirva este (largo) post para intentar debatir sanamente -en público o en privado- acerca de los tan comentados premios de la Academia.